Me conecto con mis emociones, aquellas que, cuando quieren, me hacen sentir feliz o infeliz. Es difícil lidiar con situaciones que me llevan a experimentar emociones contrariadas, de conflicto. Siento que no puedo más, que quiero terminar y empezar otra forma de vida, pero tengo miedo. Me atan lazos a personas, me atan lazos al miedo, que permito que no me dejen dar otros pasos a otros caminos. Vivo donde no quiero vivir, como donde no quiero comer, duermo donde no quiero dormir, pero lo único q me anima es la idea que sé que va a cambiar, pero solamente depende de mí. Jamás imaginé ser un peligro para otros, jamás pensé ser un peligro para mí misma. Al borde de todo no me gusta sentirme vivir. Quiero cambiar, quiero moverme, quiero ser otra persona para no vivir lo que vivo ni pensar en lo que pienso, porque no me hace bien. Mi cable a tierra, mi amado retoño. Quien por él me detengo en todo sentido, para bien y para mal. A quien no dejaría, a quien jamás traicionaría ni me traici
Que bonito es leer las lineas inspiradas en mi pasado, me hizo recordar pasajes tristes y típicos cuestionamientos de una adolescente descubriendo el mundo. Pensé que no habría vivido lo suficiente para ser interesante pero ahora estoy segura que mi mente estuvo bastante entretenida y aventurera en aquellas épocas. La verdad es que quise siempre volver a escribir aquí, al menos una vez al año, pero lo he ido postergando (típica actitud en mis post anteriores jaja). Actualmente he podido obtener mi licenciatura en Psicología y culminar una maestría, que en el año 2010 no me imaginaba poder animarme a hacerlo. Durante estos años he podido obtener bastante experiencia en diversas cosas que tampoco supuse que se presentarían en mi vida, que creo que hubiesen sido en su momento excelentísimos post jamás leídos en mi blog. Supongo que estas líneas quedarán almacenadas en algún rincón de la red que jamás será leído sino solo por mí, pero bueno, no está de más poder decir algunas palabr