Ella se encontraba sentada en su jardín. Había decidido ponerle fin a ese pensamiento que le agobiaba cada ves que le hacían recordar. "Ese tema" cada ves que lo mencionaban producía dentro de ella una pena tan profunda, y lo peor aun no podía expresarlo, y no solo eso, sino que también no quería hacerlo, ella misma daba lugar al dolor. Mientras ella estaba en esa lucha decisiva recibe una llamada, era Él, la persona que había entrado a su vida en un momento tan perfecto y que lo consideraba el complemento de esa felicidad que en aquellos tiempos estaba experimentando. En un momento de la conversacion entretenida, llego de nuevo esa frase hechando a la borda lo que estaban conversando. Ella se torno muda, casi ausente. En ese momento sin decir palabra alguna para despedirse, colgo el telefono, se siento y dirigio su mirada a un punto fijo, como si no tuviera motivo para ello. Y se dijo a si misma: ¨Esto no puede seguir flagelando mi corazon cada momento que me lo recuerd
Antes: adolescente enamorada y antisistema Ahora: mamá hasta por los poros